Un Pasado Milenario: De Cerasio a Condado
Cerezo de Río Tirón, antiguamente conocida como Cerasio o Ceresio, hunde sus raíces en la historia profunda de la Península Ibérica. Su estratégica ubicación, dominando el corredor de la Bureba y el valle del Tirón, la convirtió en un enclave codiciado y habitado desde tiempos prerromanos por tribus como los Autrigones y Berones.
Con la llegada de Roma, la cercana Auca Patricia (identificada en sus inmediaciones) floreció como una importante civitas y sede episcopal, testimonio de la romanización de la región. Sin embargo, es en la Alta Edad Media cuando Cerezo adquiere una relevancia crucial. Convertida en fortaleza y cabeza del Alfoz de Cerezo, fue uno de los pilares en la formación del Condado de Castilla. Figuras legendarias como el Conde Casio, quien según la tradición fortificó el primer castillo en el siglo VIII, y condes castellanos como Gonzalo Téllez y Fernán González están intrínsecamente ligados a su historia, defendiendo y expandiendo la frontera cristiana.
La villa fue también un importante cruce de caminos, incluido el Camino de Santiago, que trajo consigo un flujo constante de gentes, ideas y comercio, enriqueciendo su tejido social y cultural.